Está situada en el campo de Canela, en el margen izquierdo de la carretera que une el casco urbano de Ayamonte con la barriada de Punta del Moral. La Torre de Canela es una construcción de carácter militar que tuvo como objetivo esencial el servir de defensa de nuestra costa ante la posible invasión de piratas.

La costa atlántica de Andalucía comprendida entre las desembocaduras del Guadalquivir y del Guadiana se veía, frecuentemente, sometida a ataques y desembarcos fugaces y sangrientos de los corsarios turco-berberiscos. Era una costa en la que no existían fortificaciones medievales, como ocurría en las costas del Levante español. Los únicos castillos que existían en la zona eran urbanos, como los de Huelva, Cartaya, Lepe, y Ayamonte, pero todos ellos estaban muy separados de la costa. Por otro lado la baja densidad de la población en esta costa andaluza hacía que apareciera desguarnecida, y por tanto sus dispersos y pobres poblados eran objetos de numerosos saqueos y sus habitantes y pescadores de cabotaje sufrían continuas amenazas y cautiverios, que llevaban luego a sus parientes, hijos y amigos a tener que pagar un rescate, con lo que aún se empobrecían más.

Por todo ello se elaboró un plan defensivo basado en la construcción de cuarenta torres de almenara, desde Gibraltar hasta Ayamonte. Desde la torre, situada a la orilla del Atlántico, se dominaba toda la playa y la desembocadura del Guadiana; pero la línea de costa se ha retirado mucho en los últimos cuatrocientos años, resultando hoy difícil la reconstrucción teórica del entorno primitivo.

En apariencia, la torre ofrece hoy un excelente estado de conservación. Tiene forma de tronco de cono, y se levanta sobre un plinto visible de 2 m. de altura, que está construido de una cuidada mampostería de sillares a escuadra. La altura total es de 17’90 m.